Salud y Nutrición

Salud y Nutrición

ARFID: El Impacto Cerebral de un Trastorno Alimentario

gettyimages-cincociencincuenta-seismillóncuatrocienveinte-milcuarenta-nueve-uno

ARFID: El Impacto Cerebral de un Trastorno Alimentario Incomprendido

El trastorno por evitación/restricción de la ingesta de alimentos (ARFID, por sus siglas en inglés) es un desafío creciente en el ámbito de la salud y la nutrición, que va más allá de la simple falta de apetito o el “comedor selectivo” habitual en algunas personas. Reconocido oficialmente en el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5) en 2013, este trastorno está ganando atención por su repercusión en la calidad de vida y la salud mental de quienes lo padecen. Un reciente estudio, publicado en la revista ACAMH LEARN, ha comenzado a desentrañar las bases neuroanatómicas de ARFID, sugiriendo que el cerebro podría desempeñar un papel esencial en su desarrollo.

¿Qué es ARFID y cómo afecta a quienes lo padecen?

A diferencia de otros trastornos alimentarios como la anorexia o la bulimia, ARFID no está relacionado con preocupaciones sobre la imagen corporal. En lugar de eso, se caracteriza por una falta de interés en la comida, aversiones sensoriales o un miedo excesivo a las consecuencias físicas de comer, como atragantarse. Esto puede llevar a patrones de alimentación tan restrictivos que comprometen las necesidades nutricionales, afectando tanto el crecimiento físico como el bienestar psicológico. Aunque ARFID puede aparecer a cualquier edad, es especialmente prevalente en la infancia y la adolescencia, donde también puede influir en las relaciones sociales y en la participación en actividades cotidianas.

a-tres-year-old-little-boy-having-his-lunch-at-home
El ARFID puede aparecer en cualquier etapa de la vida, se caracteriza por la falta de interés en la comida y las aversiones sensoriales como el miedo a atragantarse.

Pocos estudios, pero un gran descubrimiento

La investigación sobre cómo ARFID afecta al cerebro aún es incipiente. Hasta el momento, existen pocos estudios que utilicen técnicas como la resonancia magnética funcional (fMRI) para analizar cómo el cerebro responde ante diferentes tipos de alimentos en personas con ARFID. Un estudio reciente realizado con niños de entre 9 y 13 años en los Países Bajos buscó entender si había algún vínculo entre los síntomas de ARFID y cambios en la estructura cerebral. Los niños fueron clasificados según los criterios del DSM-5 para determinar si presentaban síntomas de este trastorno.

Principales hallazgos del estudio

Los resultados mostraron que los niños con ARFID presentaban un mayor grosor cortical en ciertas áreas del cerebro, en especial en las cortezas frontales superiores. Estas zonas están asociadas con funciones ejecutivas como la toma de decisiones, el control de impulsos y la regulación emocional. Los cambios observados en el cerebro de los niños con ARFID son similares a los que se encuentran en otros trastornos alimentarios como la anorexia y en condiciones como el autismo, que a menudo coexisten con ARFID.

Este aumento del grosor cortical podría indicar alteraciones en el desarrollo cerebral, ya que durante el crecimiento normal del cerebro, se producen procesos de poda sináptica (eliminación de conexiones neuronales innecesarias). Las investigaciones sugieren que tales alteraciones también están relacionadas con trastornos del neurodesarrollo como el autismo y el TDAH. Asimismo, el grosor adicional en los lóbulos frontales podría estar vinculado con dificultades en el control de impulsos, la atención y la planificación.

Sin embargo, el estudio no puede determinar si estos cambios cerebrales son la causa, la consecuencia o simplemente un rasgo asociado con los síntomas de ARFID. Aún se necesita más investigación para esclarecer la relación entre la estructura cerebral y el trastorno, así como para explorar si las deficiencias nutricionales influyen en estos cambios cerebrales o si ya estaban presentes de forma previa.

La necesidad de una formación especializada

Los hallazgos de este estudio resaltan la importancia de contar con profesionales especializados que puedan abordar los trastornos alimentarios de manera integral. Si te interesa profundizar en el campo de la nutrición y la salud, UNEATLANTICO ofrece el Grado en Nutrición Humana y Dietética. Este programa está diseñado para quienes buscan adquirir competencias en ciencias de la nutrición y enfrentar los retos actuales en el ámbito sanitario, de restauración y promoción de la salud.

En un mundo donde la demanda de expertos en nutrición sigue creciendo, este grado no solo ampliará tus horizontes profesionales, sino que también te permitirá hacer una diferencia significativa en la vida de muchas personas. ¡Es el momento perfecto para avanzar en tu carrera!

Colaboradores