El exceso de consumo propicia nuevas fórmulas eficientes para reutilizar el agua y convertirlo en un bien inagotable para el ser humano
A pesar de contar con un planeta en el que el 70% de su superficie es agua, nos encontramos con que el 2% es dulce y tan solo un 0,007% es potable. Asumiendo esa pequeña cantidad se vuelve más apremiante generar técnicas para reutilizar el agua
¿Sabías que el agua es más antigua que el Sol?
De hecho, los expertos afirman que su origen se produjo muy lejos del planeta terrestre, dando cuenta de la escasa cantidad de deuterio que tenemos en nuestro planeta y que es insuficiente para formar toda el agua existente.
La teoría de los científicos asevera que el deuterio (isótopo de hidrógeno indispensable para formar agua), se encontraba en la nebulosa presolar. Por tanto, el oxígeno e hidrógeno que la componen se unieron en el espacio para formar H2O antes de que se formase la tierra.
Pero debido a la contaminación y sobreexplotación de este recurso natural, vemos como cada año se reduce la cantidad disponible para el consumo. La ONU cifra en 1100 millones de personas las que carecen de acceso directo a fuentes de agua potable.
A luz de estos datos es necesario la recirculación y reutilización del agua con el fin de cambiar la tendencia y disponer de un abastecimiento de agua al alcance de más personas.
Ciclo infinito del agua en la Estación Espacial
En una misión espacial es fundamental gestionar los recursos, ya que estos son limitados y se tienen en cuenta los posibles contratiempos que puedan surgir.
Los astronautas tienen asignados 3 litros y medio de agua al día, pero gran parte de esa cantidad proviene de sus fluidos corporales. Mediante un tratamiento de la orina y otros fluidos se purifica para hacerla óptima para el consumo humano.
Volviendo al plano terrestre, técnicas como la mencionada anteriormente se vuelven necesarias para revertir la escasez que sufrimos. Nos encontramos cada vez con más ciudades que adoptan técnicas de depuración para reutilizar el agua residual, con el fin de optimizar los recursos dándoles más vidas.
Mayor eficiencia para desalar el mar
Con un 97,5% de agua salada en La Tierra, son cada vez más habituales los procesos para desalar el agua, como la ósmosis inversa.
Es un proceso eficiente y sostenible que genera hasta 4,5 veces menos emisiones de efecto invernadero que el resto de tecnologías de desalación.
En esta misma línea, cabe destacar que la Universidad Europea del Atlántico (UNEATLANTICO), promueve estudios para la formación de profesionales capacitados para enfrentar las demandas actuales de la sociedad y del medioambiente. Todo ello, gracias al Grado en Ingeniería de Organización Industrial.
Fuente: Técnicas de reutilización del agua
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