Recurrir a dietas para lograr perder peso es lo primero que se nos viene a la cabeza, aunque existen otras fórmulas eficaces
La razón principal para perder peso es el cuidado de la salud, en relación con la evidencia científica de la relación entre el peso corporal y los posibles problemas como dolencias cardiacas o diabetes.
Para otras personas el motivo es la imagen, dando gran importancia al aspecto físico y esforzándose por perder los kilos de más.
A pesar de ser un proceso solitario y exigente, la variedad de recursos ayudan a alcanzar la meta de manera segura y efectiva.
Dietas pasajeras
Existen tantas dietas como desinformación o falsas creencias al respecto. La mejor manera de perder peso es escoger alimentos saludables para nuestras comidas.
Además, la rutina se debe complementar con actividad física y un descenso de la ingesta de calorías.
Las dietas de moda son contraproducentes para perder peso. Es más, las autoridades sanitarias dejan claro que se tiene que desconfiar de las recetas milagrosas que ofrecen resultados inmediatos.
En este sentido, el abandono de las dietas y el efecto contrario al deseado son el resultado que más se repite.
Escoger alimentos saludables
El hecho de reducir la ingesta total de calorías no está reñido con renunciar al sabor o al disfrute de las comidas.
Una opción aconsejable es dar prioridad a los alimentos de origen vegetal y de forma variada. Frutas, verduras y cereales integrales.
Comer raciones pequeñas
El tamaño de las raciones es un concepto subjetivo, ya que cada persona lo entiende de manera diferente. Coger un plato más pequeño puede ayudar a orientarnos en ese aspecto.
También pueden servir otros trucos:
- Elegir productos lácteos bajos en grasa.
- Comer al menos cuatro porciones de fruta a diario.
- Reemplazar los granos refinados por cereales integrales.
- Comer cantidades moderadas de grasas saludables, como el aceite de oliva, aguacates, nueces y aceites de frutos secos.
- Reducir el consumo de azúcar.
Ejercicio semanal
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la actividad física como cualquier movimiento corporal producido por los músculos esqueléticos, con el consiguiente consumo de energía, incluso durante el tiempo de ocio, para desplazarse a determinados lugares y desde ellos, o como parte del trabajo de una persona.
En relación con lo anterior, los adultos deberían realizar actividades físicas aeróbicas moderadas durante al menos 150 a 300 minutos; o actividades físicas aeróbicas intensas durante al menos 75 a 150 a la semana.
Para terminar, cabe mencionar que aquellos interesados en ampliar sus conocimientos en el ámbito de la salud y en todo lo que afecta a la calidad de vida de las personas, pueden optar por la formación que ofrece la Universidad Europea del Atlántico (UNEATLANTICO) a través del Grado en Nutrición Humana y Dietética.
Fuente: Tres tácticas para perder peso sin necesidad de hacer dieta
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