El consumo de bebidas azucaradas se ha convertido en un problema mundial que afecta a la salud de millones de personas.
Según un estudio realizado por la Universidad de Tufts, publicado en la revista Nature Communications, el consumo de bebidas azucaradas ha aumentado casi un 16% entre 1990 y 2018 a nivel mundial. México encabeza la lista de países con mayor ingesta, seguido de Etiopía y Estados Unidos.
Resultados de la investigación
El estudio también reveló que las bebidas azucaradas, como refrescos, jugos industrializados y bebidas energéticas, han sido relacionadas con enfermedades como la obesidad, enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2, cáncer y caries dental. Además, se ha observado un mayor consumo en hombres y en personas más jóvenes.
A nivel global, en 2018 se consumían en promedio 2.7 porciones de bebidas azucaradas por semana. La ingesta variaba considerablemente según las regiones; en el sur de Asia se reportaba un promedio de 0.7 porciones por semana, mientras que en América Latina y el Caribe el promedio era de 7.8 porciones por semana. Es preocupante que México sea el país con mayor consumo de bebidas azucaradas, llegando a 8.9 porciones por semana. En contraste, países como India, China y Bangladesh presentan un consumo mucho menor, con apenas 0.2 porciones por semana.
En general, el consumo de bebidas azucaradas era más frecuente en hombres y en personas jóvenes. Sin embargo, se observó que en algunas regiones como África subsahariana, el sur de Asia y América Latina y el Caribe, el consumo era más habitual entre adultos con mayor nivel educativo.
¿Qué hacer para detener esta situación?
Dados los perjudiciales efectos de estas bebidas en la salud pública, es urgente tomar medidas para reducir su consumo. Es necesario poner en marcha políticas y programas de promoción de una alimentación saludable, especialmente en aquellos países con mayores índices de consumo. Además, es importante fomentar la educación nutricional en la población y concientizar sobre los efectos negativos de las bebidas azucaradas.
En conclusión, el aumento del consumo de bebidas azucaradas a nivel mundial representa un desafío para la salud pública. Es fundamental promover una alimentación balanceada y reducir la ingestión de bebidas cargadas de azúcar. Solo así podremos mejorar la calidad de vida de las personas y combatir las enfermedades asociadas a este hábito dañino.
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Fuente:
El consumo de bebidas azucaradas en el mundo repunta casi un 16% desde 1990, con México a la cabeza
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